Imaxe:
San Antonio de Padua
Ficha técnica
Número de inventario:
328
Materia / Soporte:
Lienzo
Contexto cultural / Estilo:
Barroco
Cronología:
1669[ca]
Clasificación:
Pintura
Procedencia:
Depósito: Museo Nacional del Prado (15/10/1946)
Historial:
Depositado por el Ministerio de Fomento por R.O. de 16-06-1896 en la Escuela de Artes y Oficios. Pasó al Museo de Bellas Artes, por O.M. de 02-07-1946.
Año 1951: Se expuso en la Cena de Gala en honor al Jefe de Estado. 9 de Septiembre. Ayuntamiento de La Coruña. Palacio Municipal.
EXPOSICIONES:
Año 1996: Pintores del reinado de Carlos II, Museo del Prado, Exposición itinerante.
Medidas:
Con marco: Altura = 173 cm; Anchura = 104 cm; Profundidad = 6,5 cm
Lienzo: Altura = 159 cm; Anchura = 90 cm
Técnica:
Pintura al óleo
Objeto:
Cuadro
Escena que representa el momento de la visión del niño Jesús por san Antonio que aparece en este lienzo sosteniéndolo sobre un libro. A partir de la imagen que se creó para evocar su visión del niño Jesús o bien de la aparición de la Virgen para entregárselo, el niño se convirtió en su atributo más habitual. A este se añadieron otros como el libro, símbolo de la Biblia y de su dedicación a predicar la Palabra de Dios, o el ramo de azucenas que se refería a su pureza. Por su condición de fraile franciscano, se le representó vestido con el sayo marrón sujeto por el cordón de tres nudos significativos de los votos de pobreza, obediencia y castidad. San Antonio de Padua, canonizado en el año 1232, fue uno de los santos más representados en la pintura religiosa desde el siglo XVI, paralelamente a la gran popularidad que adquirió su culto. Coello lo representó arrodillado en el peldaño de una escalera de piedra para crear efectos de perspectiva y destacó la sólida corporeidad de su figura sin usar apenas elementos de ambientación.